Muchas veces, al contratar candidatos o postularse a una vacante, las personas suelen enfocarse en las habilidades técnicas que requiere la posición, es decir, en los conocimientos y herramientas solicitadas para desempeñar dicha tarea. Sin embargo, aunque éstas son sumamente importantes, no podemos olvidar la existencia de otras habilidades.

Las soft skills o habilidades blandas son aquellas aptitudes y rasgos de personalidad de cada individuo, además de ser una forma en que interactuamos con los demás, por ejemplo: ser extrovertido, saber gestionar el tiempo, resolver problemas, etc. Éstas son igual de importantes que los conocimientos pues se vuelven fundamentales en cualquier área de trabajo.  

Por ello, es fundamental que tanto reclutadores como candidatos presten atención a las soft skills que se requieren de acuerdo a las necesidades de la organización y del puesto pero, ¿cómo identificarlas? Existen diferentes maneras dentro del área de atracción de talento:

• Modelo STAR: Entender cómo actúa la persona bajo diferentes situaciones te puede dar información sobre su personalidad, actitud y la manera en que puede resolver problemas.
• FODA: De esta forma se puede saber las fortalezas, oportunidades, amenazas y debilidades de las personas.
• Técnicas proyectivas: No hay mejor manera de conocer a alguien que poniendo escenarios hipotéticos, ver como se relaciona y actúa puede mostrar ciertos aspectos de su vida.
• Conocer la vacante: Así como cada posición requiere de ciertos conocimientos, también necesita algunos rasgos de personalidad, lo ideal es realizar un esquema de las habilidades necesarias, de esta forma será más fácil encontrar lo que buscas.
• Pruebas psicométricas: Éstas son muy comunes en los procesos de selección, siempre es bueno aplicarlas.
• Referencias laborales: Los compañeros de trabajos anteriores te pueden dar una idea mejor acerca del comportamiento del candidato.

Lo más importante durante el proceso es mantener escucha activa ante las respuestas del candidato, pues son la mejor manera de identificar si realmente cuenta con las competencias requeridas y las que se describen en su CV.

Ahora, como candidato, es fundamental realizar un examen de autoconocimiento de personalidad y así conocer las ventajas de éstas. No basta con poner las skills más conocidas o solicitadas, pues los conocimientos se pueden adquirir, sin embargo, la actitud y rasgos de personalidad son difíciles de cambiar. Siempre afronta cada proceso con honestidad.